Nosotras vivimos sumergidas en nuestros “problemas”, y nuestras preocupaciones que son, tener buena salud para cuidar a nuestra familia, poder llegar a fin de mes sin gastar demasiado de la tarjeta, mientras en otra parte del mundo, las mujeres son pisoteadas sin piedad, dominadas por una sociedad machista, hasta el punto de ser asesinadas por el hecho.
Eso el lo que ocurre en Irak, que lejos de solucionar esas represiones como prometía Bush, tras la guerra su situación se ha agravado. Con un índice de 10 mujeres asesinadas por mes, simplemente por vestir a la europea o ir maquilladas. Las chicas jóvenes declaran que sus abuelas eran más libres, que mientras hace unos años se discutía si llevar velo o no ahora es casi imposible ver a alguna mujer que no lo lleve.
Mientras nosotras, decidimos si maquillarnos, o que ropa nos ponemos, ellas no tienen ese privilegio, estas mujeres son humilladas constantemente y lo que hacen la mayoría es lo contrario, están en sus casa cómodas, vestidas con jeas como les gustaría siempre estar, y cuando salen a la calle tienen que esconder que son mujeres, y no por que sus padres las regañen, sino bajo pena de muerte.
Ni la Policía, ni las autoridades hacen nada para remediarlo, no gastan medios ni se molestan en investigar los hechos, las mujeres viven aterrorizadas, el Gobierno es débil tras la guerra y el odio lo descargan sobre ellas.
Las mujeres siguen siendo el medio entre las guerra, que ya deberíamos dejar de utilizar.
Eso el lo que ocurre en Irak, que lejos de solucionar esas represiones como prometía Bush, tras la guerra su situación se ha agravado. Con un índice de 10 mujeres asesinadas por mes, simplemente por vestir a la europea o ir maquilladas. Las chicas jóvenes declaran que sus abuelas eran más libres, que mientras hace unos años se discutía si llevar velo o no ahora es casi imposible ver a alguna mujer que no lo lleve.
Mientras nosotras, decidimos si maquillarnos, o que ropa nos ponemos, ellas no tienen ese privilegio, estas mujeres son humilladas constantemente y lo que hacen la mayoría es lo contrario, están en sus casa cómodas, vestidas con jeas como les gustaría siempre estar, y cuando salen a la calle tienen que esconder que son mujeres, y no por que sus padres las regañen, sino bajo pena de muerte.
Ni la Policía, ni las autoridades hacen nada para remediarlo, no gastan medios ni se molestan en investigar los hechos, las mujeres viven aterrorizadas, el Gobierno es débil tras la guerra y el odio lo descargan sobre ellas.
Las mujeres siguen siendo el medio entre las guerra, que ya deberíamos dejar de utilizar.
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